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Descripción
El aceite de albaricoque procede de la semilla del albaricoque. Rico en ácidos grasos insaturados y vitaminas A y E, revitaliza la piel.
Se utiliza desde hace siglos como tratamiento protector y antiarrugas para pieles cansadas o apagadas, gracias a su efecto iluminador. El aceite de albaricoque es ideal para masajes, ya que posee propiedades nutritivas y emolientes apreciadas por todo tipo de pieles.
✔ Tonifica ✔ Reafirma ✔ Suaviza ✔ Proporciona a la piel un brillo y un tono saludables
Condiciones de uso
Utilícelo puro como aceite de masaje en pieles sensibles. Mezclado con su loción corporal tras la exposición al sol, calma la piel y le da un efecto bronceado.
Utilizado a diario sobre el rostro y el cuerpo, alternándolo con aceite vegetal de zanahoria, proporciona un efecto de "brillo saludable".
Composición
Prunus Armeniaca Kernel Oil
Première pression à froid des amandes contenues dans les noyaux.